LA
EDUCACIÓN Y LOS DERECHOS HUMANOS
Oscar Guillermo Sabogal y Paulina Mendieta
Para
Abraham Magendzo (2006). “El rol de la educación en derechos humanos es enseñar
a mirar de frente, aunque esa mirada cause sufrimiento, angustia, impotencia.
Enseña a que no se puede dar la espalda y decir “no es asunto mío” aunque no
sea asunto mío; o decir “por qué yo... que se preocupen otros, los más
cercanos” aunque sea yo el más lejano de los lejanos”.
En
tal sentido el compromiso de la educación centrada en el respeto de los
derechos humanos debe buscar formar una conciencia humana crítica y
comprometida con el otro, dejando de lado el egoísmo cimentado históricamente
en el yo. Y que aunque desde una
posición donde aparentemente no se tenga injerencia de ninguna índole todos
podemos contribuir desde nuestras capacidades al logro de las metas y
objetivos que nos proponemos como seres
humanos, comprometidos con la naturaleza y con los otros seres que hacen parte
de ella, lo mismo que con ella misma para hacer más alegre la existencia
mientras se viva, para que haya un equilibrio verdadero que permita la
coexistencia de todos en armonía.
Filosofía
de la existencia a la manera de Lévinas partiendo de que en este caso la
otredad está representada por la naturaleza y los demás seres vivientes que la
componen.
Una
educación centrada en el
“antropocentrismo” termina tomando al ser humano como el único sujeto de
derechos, rey del universo y dueño y señor de todo; como propietario de todo lo
que existe por derecho propio. Concepto que ha hecho acrecentar su individualismo por encima de
todo lo demás.
Se
puede decir que esta posición antropocéntrica está enmarcada dentro del
universalismo, entendido el universalismo en palabras de Immanuel Wallerstein
…(pág. 41) como: “El
universalismo significa, en términos generales, la prioridad de reglas
generales aplicadas en forma igual a todas las personas, y por lo tanto, el
rechazo a las preferencias particulares en la mayoría de las esferas. Las
únicas reglas consideradas permisibles dentro del marco del universalismo son las
que pueden demostrar su aplicación directa al funcionamiento adecuado del
sistema-mundo definido en forma restringida”.
La anterior definición
está estrechamente relacionado con el concepto de
globalización y no de globalidad que al respecto Francisco Estévez citado por
Magendzo al tratar el tema de la diversidad dice: “La globalidad tiene que ver
con la interculturalidad, con la comunicación, con el encuentro de mundos
distintos que inevitablemente entran en relación y establecen formas culturales
o comunicaciones comunes (…). La globalización es cuando se ordena ese
encuentro en torno a una relación determinada de poder, o a una lógica
económica y cultural determinada”. Regida por el principio ideológico impuesto en occidente.
Así
pues, que el concepto de globalización no sería pertinente para el caso porque
se entiende como la complementariedad de la diversidad que busca uniformar a la
humanidad en torno a un mismo pensamiento que en la práctica pretende convertir
al planeta tierra como una especie de hormiguero sometido a una jerarquía
establecida y donde cada ser humano cumple una función específica a favor del
statu quo fundado desde una pirámide hegemónica.
En
consecuencia la dinámica epistemológica
de nuestro proyecto de investigación se enmarca dentro del relativismo cultural
de los Derechos Humanos, por la cual queremos auscultar al interior de la
comunidad cómo ha sido la vivencia de los Derechos Humanos en un lapso de
tiempo comprendido entre 1991 y 2012,
con el único propósito de construir una memoria histórica verdadera y contarla
a las presentes y futuras generaciones entendiendo que la memoria histórica de
una comunidad acorde con la revista Pueblo textualmente nos dice “La memoria
histórica no debe reducirse a estudiar lo acontecido con la parte perjudicada
en un conflicto todavía reciente. La memoria histórica debería estudiar las
razones históricas (menos recientes) que condujeron a ese conflicto”, en este
caso se pretende reconstruir una memoria histórica que dé cuenta de cómo ha sido la vivencia de los Derechos
Humanos en el Corregimiento el Bosque Murillo Tolima en el lapso de tiempo
comprendido desde 1991 hasta el 2012.
En
este sentido lo que se pretende es buscar la reconstrucción verídica de la
memoria histórica de la comunidad que aunque obedezca a unos patrones sociales,
económicos, culturales, políticos e ideológicos establecidos desde las fuerzas
de poder de la nación debe presentar aspectos característicos que la
particularicen o simplemente que nos confirmen que obedece fielmente a estos
patrones establecidos.
Dentro
del contexto a investigar se ha encontrado cinco categorías principales:
actores armados, Derechos Humanos; Conflicto armado; Derecho Internacional
Humanitario; violaciones de los Derechos Humanos. Categorías a las cuales se
pretende dar claridad mostrando la realidad acontecida en la región en el lapso
ya descrito mediante el proceso investigativo.
No
obstante dentro de los contextos de los Derechos Humanos y el Derecho
Internacional Humanitario es donde se genera la polémica hacia qué enfoque se
puede encaminar pues es un hecho real que los actos de violencia en Colombia
generan violaciones a los Derechos Humanos y al Derecho Internacional
Humanitario que obedecen a una dinámica
universal de los Derechos Humanos.
De
alguna manera este proceso debe conducir
a la construcción de una memoria histórica que
cuente del pasado, se ubique en el presente y se proyecte en un futuro,
donde la comunidad reconozca que es
objeto de derechos; hasta qué punto se los han vulnerado para que no quede como
una comunidad carente de historia y por ende sumida en el olvido que según
Giraldo M. Javier en su texto Memoria Histórica y Construcción de Futuro
(2004). “El olvido constituye una
agresión más contra las victimas no puede ser leído sino como aceptación,
tolerancia, o connivencia con los crímenes que destruyeron su vida y dignidad y
negaron todos sus derechos. ¿Con qué coherencia moral se podría defender en
adelante la dignidad de los derechos de otra potenciales víctimas?, además, el
olvido prolonga en el presente y hacia el futuro la estigmatización de las
víctimas, de sus proyectos históricos, de sus sueños y utopías. Aceptar el
olvido es asentir y compartir con los victimarios el exterminio de todo esto
que era el objetivo de los crímenes de lesa humanidad”.
BIBLIOGRAFÍA
Marx,
Carlos. (1843). Sobre la cuestión judía.
Magendzo,
Abraham. (2006). Alteridad y diversidad
componentes fundamentales de la educación en Derechos Humanos.
Magendzo,
Abraham. (2006). Alteridad y diversidad componentes fundantes de la
educación en derechos humanos.
Giraldo M,
Javier. (2004). Memoria
Histórica y Construcción de Futuro.
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